17 mayo, 2017

51 ~ Me quité los zapatos

En este mismo instante el mundo cuenta con 7.505.175.125 habitantes, nunca estaremos solos.
No dependo de nada ni de nadie, y siento el alivio de que nadie depende de mi. Estoy plantada frente al mundo, y me doy cuenta que la soledad no existe; siempre nos tendremos a nosotros mismos, y ver que somos capaces de tanto, me hace pensar que es triste porque jamás nos imaginamos lo fuertes que podemos llegar a ser.

Todo depende de una mirada, y tal vez una sonrisa. Un latido, un escalofrío. Depende de conocer y dejar pasar, de aprender, y de amar. A dejar de creer en mitades, y ver que si nos sentimos vacíos no nos debemos completar por otros, sino debemos dibujarnos, crearnos, construírnos, a base de cada pieza que nos encontramos por nuestro camino y ponerles nuestro nombre, hacer esas piezas nuestras. Hacer todo lo que hagas con el corazón; siempre siento que se me sale del pecho, porque no hay nada más bonito que, a parte de ser capaz de vivir, ser capaz de sentir la vida.

Me cojo de la mano, y siento que soy el único apoyo que necesito. Saber que yo puedo, con todo y más. Canalizar toda esa energía y convertirla en fuerza, en valentía. Quitarme los zapatos y sentir que ahora tengo un peso menos, y después pisar bien fuerte. Plantarle cara a la vida.

Aún no sé si fui yo quien se escapó de mi propio vacío, o si el vacío que sentía se desprendió de mi. Pero no me he dado cuenta de lo infeliz que era, hasta el momento en el que he sido realmente feliz. Y por eso, hoy me quiero dar las gracias, por haberme dado el empujón que necesitaba, y por hacerme ver que mi vida se dirigía hacia otro camino, el que recorro ahora. El cual sin ser del todo consciente ansiaba por recorrer, el que me hacía falta.

Pero esta vez no lo recorro andando, he preferido hacerlo volando.

You can still be what you want to, what you said you wer

https://www.youtube.com/watch?v=XIRmAIMjevE

No hay comentarios:

Publicar un comentario